|
Una empresa pionera en Espana ha puesto las t�cnicas teatrales al
servicio de los directivos y ejecutivos para aprender a ser m�s claros,
trabajando la fusi�n de la voz, la palabra, el cuerpo y la emoci�n con la
ayuda de Calder�n, Churchill y Shakespeare. El 90 por ciento del impacto del
mensaje reside precisamente en la voz, la respiraci�n y el cuerpo, y tan
s�lo un 10 por ciento en la palabra, cuenta en una entrevista con Efe la
actriz y productora Mercedes Alegre, quien integra la compan�a M�sclaro (masclaro.net)
junto a su directora y fundadora Sylvia Carrasco.
Ambas acaban de publicar "El Poder de ser m�s claro. Nuevos atajos
para alcanzar el �xito profesional" (Netbiblo), que hoy presentar� el actor
Juan Echanove, un libro fruto de sus experiencias en los cursos que imparten
a altos directivos espanoles y extranjeros. Sylvia y Mercedes, las dos con
una amplia experiencia en el mundo de la comunicaci�n, se percataron de que
la capacidad, brillantez e inteligencia de los ejecutivos en ocasiones
quedaba empanada debido a su d�ficit de "comunicaci�n adecuada".
"Los ayudamos a darse cuenta de que la comunicaci�n pertinente tiene
una repercusi�n directa sobre la cuenta de resultados", subraya Mercedes
Alegre. Tambi�n se dieron cuenta de que en Espana algunas compan�as
dedicadas a este campo se centraban casi exclusivamente en el fondo (la
palabra) y otras trabajaban la forma, pero ninguna un�a ambos elementos,
cuando los dos tienen que ser "indisociables".
As�, el curso titulado "Directivos con mucho teatro" emplea los
textos de Shakespeare o Calder�n para extraer las habilidades y valores que
se le suponen a un l�der, explica Mercedes durante el receso de un curso que
imparte a directivos de una de las grandes entidades financieras del pa�s.
Otra cualidad del teatro es que la ficci�n ayuda a escarbar en lo m�s
profundo del ser humano y ayuda a conocerse mejor; "lo importante para que
exista una comunicaci�n es tener una imagen", razona. "Si t� no sabes qui�n
eres -anade- es imposible que puedas practicar una comunicaci�n adecuada y
si careces de un objetivo tampoco".
Los participantes en esta actividad y
otras similares organizadas por M�sclaro sienten cierta verg�enza, porque
implica crecimiento personal: "eso es duro ya que estamos muy reprimidos,
pero al final todos salen satisfechos", asegura Mercedes Alegre, licenciada
en Arte Dram�tico. En los cursos tambi�n se habla de neurolog�a y del
cerebro "triuno": primero apareci� el cerebro reptil -el de los impulsos-,
despu�s el del mono -el emocional y que impulsa a movernos- y el del homo
sapiens -el del aprendizaje- En el acto de comunicar "aparecen los tres y a
veces nos pueden jugar malas pasadas", concluye Alegre.
(REDACCI�N EIP)
|