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Fernando R. Lafuente, ex director del Instituto Cervantes entre 1999
y 2001, abog� hoy, con motivo del dieciocho aniversario de la instituci�n,
por que se le conceda categor�a de Secretar�a de Estado, lo que dotar�a a la
instituci�n "de mayor autonom�a y peso pol�tico". Lafuente hizo esta
reflexi�n al final del debate suscitado en el transcurso de una mesa redonda
en la que participaron todos los ex directores del Instituto Cervantes a
excepci�n del actual ministro de Cultura, C�sar Antonio Molina, quien
justific� su ausencia del acto por "problemas de agenda" y al encontrarse en
Las Palmas de Gran Canaria.
En la mesa redonda organizada por el Cervantes para celebrar su
mayor�a de edad estuvieron Nicol�s S�nchez-Albornoz (director del IC entre
1991 y 1996); Santiago de Mora-Figueroa (1996-1999); Fernando R.Lafuente
(1999-2001); Jon Juaristi (2001-2004); C�sar Antonio Molina (2004-2007); y
la actual directora, Carmen Caffarel, quien asumi� el cargo en 2007.
Ninguno de los presentes quiso responder a la pregunta de si
prefieren que la instituci�n dependa org�nicamente del Ministerio de Cultura
o de Exteriores y, entre risas, aseguraron que previamente hab�an pactado
responder a esa pregunta con que "Florentino va a ser el presidente del Real
Madrid".
Seg�n Caffarel, la pol�mica por la dependencia del Cervantes de un
Ministerio u otro "no es real", y record� que la instituci�n est� presidida
por los Reyes y que el presidente del Gobierno es el presidente ejecutivo de
su Patronato. "Esa es la imagen que queremos dar fuera", asegur� Caffarel,
quien se mostr� orgullosa de la representaci�n de Espana que el Cervantes
lleva a todo el mundo, as� como de la labor "de Estado" que realiza. Jon
Juaristi brome� al senalar que "mientras no lo transfieran al Ministerio de
Defensa, vale cualquiera".
Por su parte, su antecesor en el cargo, Fernando R. Lafuente, quiso
abrir un debate para el futuro, al que no tuvieron tiempo de responder el
resto de ex responsables del Instituto, al senalar que "si se quiere premiar
al Cervantes por su mayor�a de edad, pr�miesele dot�ndole de mayor peso
pol�tico, m�s voz y, sobre todo, m�s presupuesto", concedi�ndole rango de
Secretar�a de Estado. En la mesa redonda, Santiago de Mora-Figueroa
consider� que la imagen cultural que Espana trasmite al exterior no es la
m�s adecuada "y no se corresponde con la realidad", al ser una imagen de
"mucho Unamuno y poco Ortega", y se pregunt� tambi�n si es l�cito usar
lenguas que no sean el espanol para difundir la cultura espanola.
Todos coincidieron en que el debate sobre la imagen exterior de
Espana que se quiere trasmitir est� pendiente, alguno consider� que iconos
como Nadal o Pau Gasol est�n bien "pero son ef�meros", y pusieron de
manifiesto c�mo Italia ha sabido tirar del arte para transmitir su imagen
exterior. Todos coincidieron en que un director tras otro ha ido "sumando y
no restando" al proyecto del Cervantes y a su expansi�n por el mundo, as�
como en que la instituci�n debe perdurar y continuar la labor de propagaci�n
de la cultura espanola que desarrolla, y su primer responsable, Nicol�s
S�nchez-Albornoz, se congratul� de que la l�nea seguida "no se haya
rectificado" nunca.
Jon Juaristi puso la nota discordante al asegurar que el cambio de
pol�ticos "siempre afecta a las instituciones", y tambi�n al Cervantes,
aunque reconoci� que siempre se ha reconocido como "un instrumento decisivo
de pol�tica exterior" y que todos se han esforzado en anadir a la gesti�n
del anterior "con independencia de las adscripciones pol�ticas". Fernando R.
Lafuente hizo un llamamiento a las entidades privadas para que colaboren con
el Cervantes, petici�n a la que se uni� Caffarel al considerar que "de esa
forma tambi�n se ayudan ellas en el exterior: somos buenas companeras de
viaje".
(EFE) |